Por una Ley Nacional de Concursos para la Obra Pública

Los arquitectos agrupados en la Federación Argentina de Entidades de Arquitectos /
FADEA reclamamos, desde hace muchos años y con menor o mayor comprensión de
las autoridades de turno, una Ley Nacional de Concursos para la Obra Pública, que
brinde al Estado Nacional, Provincial, Municipal, una herramienta eficaz y
transparente de asignación de los proyectos, urbanos y arquitectónicos, que emprende.
Entendemos que, para las obras de nivel nacional y provincial, el Concurso Público
debe ser obligatorio, ya que este camino permite la elección de la mejor solución, entre
las innumerables alternativas que se presentan, para dar satisfacción a las necesidades
que plantea el comitente.
Nuestro requerimiento se basa en la experiencia que los arquitectos hemos acumulado a
lo largo de 120 años, en los que nuestras entidades han organizado concursos de todo
tipo y escala. Es esta rica experiencia la que nos permite afirmar que esta modalidad
permite otorgar transparencia a la asignación de las obras, así como asegurar que la
solución a materializar es la mejor posible para sus futuros usuarios.
El Reglamento de Concursos de FADEA establece, entre otros requisitos, el anonimato,
la presencia de representantes de los concursantes en el Jurado, y la obligación de
mismo de expresar mediante Actas los criterios de adjudicación, esenciales en cualquier
evento de este tipo para garantizar la transparencia que hemos mencionado más arriba.
Este instrumento se pone al servicio de la comunidad sin apartarse de las normas éticas
que deben regir el ejercicio profesional, enriqueciendo el patrimonio arquitectónico y
urbanístico, sumando sustentabilidad al medio ambiente o mejorando la calidad
habitacional. La mayor parte de las obras mas significativas del país fueron
concursadas, podemos citar la Biblioteca Nacional, el Hospital Garrahan, el Hotel Lla
Llao, el Monumento a la Bandera, Embajadas de Argentina en varios países e
innumerables concursos en Municipios, Bancos, Facultades, Museos. En estos últimos
años, la FADEA ha auspiciado más de 150 concursos en todo el país, permitiendo que
compitan libremente y en igualdad de condiciones, arquitectos jóvenes y con poca
experiencia, con estudios muy reconocidos.
Los concursos de Arquitectura y Urbanismo tienen, asimismo, una misión didáctica:
forman al concursante en la creación y en la disciplina y a los jurados en el ejercicio de
la crítica y la capacidad de elección. Pero estos objetivos pedagógicos se extienden
también a la sociedad, brindando enseñanzas respecto al objeto y los contenidos de la
arquitectura y el urbanismo y a la función social de los arquitectos. El público que asiste
a las exposiciones de anteproyectos, que se entera por la prensa de los concursos, que
oye hablar de los miembros del jurado y de los fallos que dan éstos, recibe una 

importante educación arquitectónica y urbana de amplia difusión, que en nuestro medio
es indispensable y de excepcional importancia
Hay en el mundo, antecedentes de leyes de transparencia, donde todas las obras públicas
se concursan, adjudicando las mismas democráticamente a las mejores propuestas.
Actualmente, son pocos los Municipios y Provincias en el país que concursan
públicamente los proyectos que construyen y no se ven en la plataforma de los
espacios políticos que participaran de las próximas elecciones municipales,
provinciales y nacionales, propuestas en este sentido.
Los arquitectos, a través de nuestras entidades representativas y cuando tenemos la
posibilidad de acceso a la función pública, debemos trabajar para que esta problemática
se incluya en las agendas políticas y para que las promesas electorales se trasunten en
realidades cotidianas. Necesitamos persuadir a políticos y funcionarios de la
importancia de la planificación a largo plazo y de la institucionalización de concursos
para la adjudicación de proyectos de obra pública.
Estamos firmemente convencidos que esta herramienta es condición necesaria y
fundamental para gobernar con transparencia y equidad y así mejorar la tan proclamada
calidad de vida de la gente.

Comisión Directiva FADEA